Crónica Giants: Huesos Humedos.

El día no comenzaba bonito para los Giants. El carro donde el equipo se dirigía a las desérticas tierras del sur, donde se llevaría a cabo el partido, tuvo un contratiempo de última hora y el retraso iba a ser irremediable. Acompañados en todo momento por unos gigantes nubarrones negros, parecía que los pasos del equipo iban más encaminados a las Charcas de Rok-Ketas que a los Desiertos de Alha-Miyá, pero así es el clima, caprichoso como un niño.

Durante todo el trayecto Eli, nuestro amado Quaterback y líder, nos animaba a superar los objetivos que nos había puesto como mínimo nuestro entrenador. Eli siempre quiere la victoria. Así que, concienciados y dispuestos a un gran día de gloria llegamos al estadio de los Guardians...

Colocados y dispuestos para el comienzo del partido no había rastros del equipo contrario, todos los Giants habían preparado su posición y ansiosos esperaban el pitido inicial. Repito. Sin señales de los Guardians. Tras unos largos 5 minutos de espera, de misteriosa espera, la tierra bajo nuestros pies comenzó a vibrar. Pequeños surcos en la fina arena se iban abriendo dejando ver la inconfundible textura amarillenta de huesos viejos. Sin duda se trataba de las artes nigrománticas de Elrudok. En menos que se come nuestro kroxi Alfrog una docena de moscas, los Khemri terminaban de encajar todas sus piezas corporales y elevaban sus brazos hacia un publico enfervorizado por la aparición. Con el ultimo chasquido de acople de un fémur tardío sonó el pitido inicial y con el... llegó la primera gota. En mitad de un desierto, en el lugar más insólito de todo el territorio abarcado por la liga, ante el equipo más torpe con el balón y comenzó a jarrear.

Aparecieron los Guardians. (El equipo de Elrudok esta más chulo que este)

- ¡Genial chicos! ¡Esto nos da ventaja! Ya sabéis cual es la premisa ¡¡¡TOUCHDOWN TOUCHDOWN!!! - gritaba Eli Ranning animado por la situación. Aunque atacaban los Guardians el equipo slann se caracteriza por su gran presión y sin duda llegó el fruto de tan osado sistema. Touchdown de contraataque.

Todo el equipo de ranas se abrazó en el campo, sin embargo Frogshaw, una de las estrellas del equipo que estaba en el banquillo debido a una lesión, echó un vistazo a la reacción del estadio ante la anotación del equipo visitante. Algo no terminaba de ir bien. Miró directamente a los ojos del entrenador nigromante y encontró una ligera y extraña sonrisa... entonces lo entendió.

- ¡Salid de la arena! ¡Salid de ahi! - Frogshaw corría tan rápido como le permitían las muletas hacia la zona técnica del banquillo tratando de avisar a sus compañeros - ¡Joder! ¡Salid de la arena! Cuando Eli se dio cuenta de que algo trataba de decirle su compañero desde la banda, procuró acercarse para poder escucharlo. - ¿Que dices Jacobs? no te oigo - lanzó la pregunta justo cuando un cráneo surcó el aire desde la grada, e impactó violentamente contra Jacobs Frogshaw - ¡Maldita sea salid de la a...! PLAFF - y cayó inconsciente.

¡Ay! que dolorcillo tengo aqui...

Lo que vino a partir de aquí nadie dentro del campo podía preveerlo, la trampa estaba cerrada y las ranas sin escapatoria. Elrudok espoleó a sus huestes de la manera mas violenta posible, y sus cuatro momias comenzaron a realizar su trabajo como picadoras. No sé cuanta sangre pudo derramarse aquella tarde. Uno a uno los Giants fueron siendo golpeados hasta la extenuacion y sacados del campo de la manera menos glamorosa de este deporte. Pronto en superioridad numérica, los Guardians consiguieron el empate... entre el repiqueteo de las oseas mandíbulas del publico. La nueva premisa para Eli y los suyo estaba clara.

- No importa ganar, no importa perder... solo sobrevivid... - acertó a susurrar mientras perdía la consciencia debido al dolor intenso que le probocó aquel cúbito astillado que penetró su armadura y su más que blanda carne.

Finalmente, el encuentro acabo en empate, más por la propia torpeza de los muertos en vida y la dificultad añadida de la lluvia, que por la defensa inexistente de los anfibios, aunque todo el equipo de la ciudad de New Frog da el mérito de ese carísimo punto, conseguido para la liga, a Hakim Ranicks que heroicamente se lanzó contra uno de los corredores enemigos, el cual rodeado por sus habituales torres de vendas o momias, perdió la posesión del balón. Hakim después tubo unas palabras con Imhotep, una de las dos torres...

FUERZA HAKIM es lo que vestirán las camisetas para el próximo encuentro de las ranas newfrogrkinas, esperando una pronta recuperación.

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